Narra Vane
Y llegamos a un punto en el que su mirada se perdió en la mía,
y yo con cada uno de sus gestos. La contuve entre mis brazos, hasta que se
recupere luego de semejante ataque de mi parte... Es que era tanto mi deseo de
hacerla mía que perdí la razón desde el momento en que me rozó sus labios.
-Vane eres increíble! –Dice recuperando un poco el aire, mientras me abraza-
-Te ha gustado cariño? –Dije besando su frente, mientras la
tenía acurrucadita en mis brazos-
-Que si me ha gustado? Joder fue el mejor polvo que me han
dado en la vida –Dijo riendo de alegría, a lo que sonreí también-
Vaya que le ha gustado he? Cuando quiere puede ser tan sexy y
a la vez tan ñoña, que me da hasta ternura.
-Pero después de lo bien que me hiciste pasar habrás quedado
con un calentón mi amor, no? –Suelta arrimándose a atacar mis labios bajando su
mano lentamente por mi vientre-
-Creí que necesitarías más tiempo para recuperarte-Dije como
pude ya que mis labios estaban siendo encarcelados por sus besos fugaces-
-A veces puedo ser insaciable cariño –Dijo lanzándome una mirada
que desprendía lujuria, mientras se mordía el labio inferior-
A lo que me sorprendió, luego de haber pasado 30 minutos a un
ritmo de contratiempos pensé que demoraría en reponer fuerzas, pero la observo
y es como si recién estuviéramos empezando...Incansable la mujer he?, mi mujer...
Creo que tendré que cambiar mis estrategias en el siguiente encuentro.
-Ahora es mi turno y ya me dirás si alguna vez alguien te
hizo esto en algún momento de tu vida, cielo –Dijo subiendo en mí y rozando mis
labios-
Creo que había despertado el lado más salvaje de Malú, y vaya
que lo desperté, luego de decir esas palabras hasta sentí miedo por mí unos
instantes... Pero era imposible no dejar ir esos miedos teniendo semejante ángel
besando mis labios tan dulcemente...
Empezó a atacar mi cuello con besos
intensos, presionando más y dejando un camino de pequeños mordiscos, mientras
que una de sus manos acariciaba mi cuerpo suavemente pero quemando cada parte
de mi anatomía por donde se posaban.
Narra Malú
Voy a devorar cada espacio de su cuerpo, así como me hizo
estremecer ella... No sé si es de día o de noche, si cuanto tiempo pasó desde que
entramos a la habitación, el espacio se redujo a la distancia de nuestros
cuerpos. Y esta cama será mi trampa para ella. Siento su agitar lento, repleto
de deseo de que continúe, me detengo en sus pechos, saboreándolos uno por uno,
dando pequeños mordiscos para que me sienta aún más, la veo disfrutar,
lentamente voy marcando mi paso y recorrido con mis besos por su vientre hasta
descender por completo a su sexo, abro sus piernas y beso sus muslos hasta
detenerme en su sexo, la miro a los ojos, ella asiente con su cabeza, indicándome
que continúe. Lo hago, acaricio su clítoris suavemente con mis dedos, ahora doy
paso a mi lengua y doy rienda suelta a mis movimientos circulares, y
succionando por momentos. Ya su respirar está más alterado de lo común, veo
que sus ojos empiezan a perderse en el placer que le causo, entonces decido
continuar estimulándola pero agregando algo más, adentro 2 de mis dedos en ella
de golpe, acelerando de inmediato la embestida repetitivamente, la observo
enloquecer y eso me gusta. Lo disfruto, lo contemplo triunfante, porque veo que
sostiene mi cabello con fuerza, como se agarra a las sábanas con ganas, me
detengo, subo a sus labios...
-Sabes una cosa cielo? No quiero que esto nunca se termine
–Dije mirándola a sus ojos y dándole unos segundos a que se recupere, mientras
la bese de manera dulce y tierna-
-Cariño, contigo quisiera quedarme así una eternidad –Dice
sonriendo y acariciando mi rostro-
Narra Vane
Adentro 3 de sus dedos, provocando en mí varios gemidos
seguidos, provocó mi delirio en solo segundos, la sentí tanto, tanto que ese
momento se resumía a su cuerpo desnudo sobre el mío, empapados de pasión...
Ahogo mis gemidos en su boca, mientras no detenía sus movimientos y ya me
estaba matando, ya había ido demasiado lejos en mi mente... Lo único que veía
era a ella encima de mí y esa imagen ya había terminado de quitarme el poco
aire que había recuperado.
Narra Malú
Y de mi mano la lleve a Vane al máximo placer hasta sentir
como vibraba su cuerpo debajo del mío, y puedo asegurar que nunca en mi vida me
había sentido tan a gusto de hacer disfrutar así a alguien, pero ella era la
excepción a todas. Me deleito al ver sus gestos y su cuerpo junto al mío, joder
siento que estoy locamente enamorada, esto no es un polvo más, esto es... amor.
·
Luego
del explosivo momento, se abrazaron y acariciadas por el cansancio se
entregaron al sueño profundo... Al día siguiente...
Narra Malú
Despierto, abro mis ojos y la encuentro a mi lado,
automáticamente se dibuja una sonrisa en mi cara, aún está dormida, la
contemplo acariciando su rostro suavemente, no puedo contenerme y beso su
mejilla para despertarla...
-Buenos días mi niña- Dice con los ojos cerrados y con su voz
semi dormida-
-Buenos días mi cielo- Dije dándole besos por todo su rostro-
-Vaya que despertaste cariñosa, he? –Dijo en tono irónico, mientras se incorporaba-
-Cosa que logras solo tu amor-Dije sonriendo y levantándome-
-A dónde vas así desnuda? Ponte algo niña, que hace frío –Dijo
sonriendo mientras me comía con su mirada-
-Ya encendí la calefacción cariño, anda levántate que la
ducha nos espera –Dije yéndome a la ducha, haciéndole seña para que me siga -
Nos dirigimos a la ducha y fue inevitable que nuestros
cuerpos se buscaran automáticamente, me tomó de la cintura y me puso contra la
pared y mientras me besaba apasionadamente, su mano navegaba por mi vientre
viajando directo a mi deseo. Una vez que llega no puedo aguantar demasiado que
me haga gemir apenas me roza.
-Vane, continúa hasta que te ruegue que pares -Dije mirándola
a los ojos y con mi voz entre cortada-
-Obedezco cariño –Dice asintiendo con su cabeza, mientras
sonríe-
Y fué la mejor mañana de mi vida, las dos debajo de la lluvia
disfrutando del éxtasis del deseo que nos desborda, una vez más logró llevarme
a la locura y sentía que mis piernas ya no respondían, ya había acabado conmigo
una vez más mi chica...Vaya que era buena! Será que por eso toca tan bien la
guitarra?
-Cariño estás bien? –Dice sonriendo mientras me tiene pegada
a su cuerpo y contra la pared-
-Te diría que nunca estuve tan bien como ahora, cariño –Dije
besándola- Dime una cosa mi cielo –Dije susurrando en su oído- quién te enseñó a tocar así?
-La guitarra, mi niña –Dijo riendo y vacilándome-
-Y ahora le dicen “guitarra”? –Dije riéndome aún más-
Estaba a punto de besarla y nos interrumpe el puto timbre, no
iba a atender, pero Vane me insistió pensando que a lo mejor sería algo
importante. Me dijo que me esperaría en la ducha así sigamos con lo nuestro,
así que me dispuse a atender lo más rápido posible para deshacerme de quién sea
que vino a molestar, me coloco la toalla y abro despacio la puerta y...
-Buenos días Malú! Lista para ensayar las nuevas composiciones?
–Dijo invitándose a pasar solo, como es habitual en él-
-Perdón Melen, pero no recuerdo que hayamos acordado que hoy
haríamos esto, cariño? –Dije parada al lado de la puerta semi abierta, con cara
de lo dejamos para otro día?-
-Entonces, veo que mis mensajes nunca te llegaron –Observándola
bien- Te dejo tiempo a que termines de ducharte y arreglarte, si quieres? –Dice
besando mi frente y logrando casi ya que vuelva a salir-
Y justo Vanesa sale del baño buscándome, por suerte envuelta
en la toalla, sino todo hubiera sido un caos... Y la cara de Melen fue todo un
poema.
-Cariño porque demoras? –Abriendo los ojos como plato cuando
vió a Melen en el salón- Ay perdón no sabía que había visitas –Dijo flipando de
nervios-
-Oh por dios! Mi fantasía hecha realidad –Dice Melen agarrándose
la cabeza con sus manos y sonriendo de felicidad- Dos mujeres en la ducha!
–Dice con cara pervertida y sonriendo-
A lo que las dos explotamos de risas, los tíos pueden ser tan
estúpidos a veces...
-Bueno venga, Melen te presento a Vanesa –Dije entre risas-
-Un gusto conocerte Melendi- Dice Vane, dándole dos besos-
-El gustazo mayor es mío, créeme –Dice entre risas Melen-
-Bueno ya, ya, que no está disponible- Dije soltando mis
celos, entre risas mirando fijo a Melen-
-Si ya me di cuenta amiga mía –Dijo riendo- Bueno las dejo, perdón
por mi torpeza –Dice despidiéndose al fin- Y que disfrutéis!
-Lo haremos cariño, créeme –Dije sonriendo y cerrando la
puerta-
-Benditas sean las paredes de ese baño Malú –Gritó, entre
risas detrás de la puerta-
A lo cual nosotras echamos a reír luego de vivir semejante momentazo
gracioso.
Narra Vane
El reloj marcaba pleno mediodía en Madrid decidí volver a
casa, para pasar la siesta con mi niño Pongo, pobre desde ayer que no lo veía,
le sirvo su comida y me siento en mi sillón a ver algo de tv mientras
almuerzo... Y suena mi móvil...
-Hola guapo cómo estás?
-Hola mi malagueña hermosa! Muy bien, paso a invitarte esta
noche a cenar, mira que ando algo desocupadillo aquí en Madrid
-Si bueno Pablete, dime dónde y a qué hora?
-Bueno a eso de las 20hs, aún no tengo el lugar pero luego te
paso la diré por whatsApp, Besos mi niña!
-Eres un desmadre niño, vale, besazos! –Dije entre risas
Narra Malú
Estaba a full en el estudio con todas las cosas del disco, marcando
algunas cosas, corrigiendo otras, y mi equipo que es increíble se complementa de la mejor manera conmigo para que todo quede a gusto. Luego veo que mi móvil
no paraba de vibrar...
-Hola cariño! –Dije con una sonrisa-
-Hola Malú, y cómo estás? Muero de la incertidumbre niña, al
final dejaron los miedos de lado?
-Amiga estoy muuuy bien, te diría que hacía rato que no me
sentía así de bien, he? –Dije riéndome-
-Amiga esto merece una plática, no crees? Cuando te desocupes
vení a casa así hablamos más tranquilas
-Si, mejor Pastora que sea tú casa, porque últimamente Melen
vive interrumpiendo en casa –Dije entre risas- Nos vemos cariño, besos
Narra Vane
Aproveché que luego del almuerzo, saqué a pasear un rato a
Pongo, a una plaza de cerca de casa, y llame a mi chica...
-Hola mi niña, qué tal el trabajo?
-Hola mi cielo –Dijo con voz de niña- Aquí de maravilla, y tú qué estás haciendo, a parte de extrañarme?
-A decir verdad no te extrañaba, sólo tenía curiosidad de
saber cómo estabas –Dije haciéndome la seria-
-Pues dicen que la curiosidad mató al gato... –Suelta intentado
ocultar que está sonriendo, cosa que percibo-
-Creo que es la primera vez en mi vida que me comparan con un
gato –Dije entre risas- Pero contigo tendría siempre curiosidad, así me mates
una y otra vez
-No te bastó con lo de anoche, cariño? –Dice con voz de niña,
cosa que me hizo encender-
-Tienes suerte de estar lejos de mí en este momento, porque si
me dijeras eso aquí de frente ya te estaría comiendo a besos
-Mmm me gusta cómo suena eso cielo... –Dice mordiéndose los
labios y suspirando-
-Nos vemos esta noche guapa?
-Sí, me encantaría, tengo una reunión con Pastora, cuando me
desocupe de ahí te llamo cariño, quieres?
-Contigo quiero todo niña –Dije entre risas-
-Mira que te tomo la palabra, he? A no arrepentirse luego
de lo que pueda llegar a hacerte –Dice con un tono de voz sexy-
-Bueno, bueno que me pones mala hasta en una llamada- Dije entre risas- Nos vemos a la noche amor, besazos!
Narra Malú
Me sentó tan bien que ella tomara la iniciativa de llamarme.
Nuestros diálogos parecían de dos adolescentes que recién descubren lo que es
el amor, si bien ninguna de las dos aún se animaba a decir lo que sentía cara a
cara, ya estaba creciendo entre nosotras algo que no podíamos detener.
Llego a la casa de Pastora y damos comienzo a nuestra plática,
sentadas en su salón...
-Y cariño cuéntame cómo te sientes hoy? Lo importante es
saber si fué lo que esperabas? –Con incertidumbre en su rostro sirviendo café-
-Si, amiga! –Dije gritando de emoción- Fué mejor de lo que me
imaginé... Amiga, siento que Vane es diferente a las demás con las que he estado, no sé siento que... –Suspirando y resoplando- me estoy
enamorando como una idiota –Dije sonriendo y mirando al suelo-
-Qué bonito lo que me cuentas, mi niña! –Abrazándome- Y bueno
es momento ya que vivas un amor de verdad, no crees? –Mirándome a los ojos-
-Si, pero ya sabes como es mi mundo... me es difícil enfrentar
esto, está mi carrera de por medio, y -Interrumpiéndome-
-Malú hija mía, ya basta de excusarte, toda tu vida viviste
para trabajar, para tu carrera, tuviste relaciones fugaces porque el tiempo no
te lo permitía, pero no crees que es momento de que dejes esos pretextos de
lado y de una vez te dediques a vivir? Aparte Vane a lo mejor sea la excepción
a todas las personas que tuviste, no crees? Mira si es el verdadero amor de tu
vida, acaso la vas a dejar ir?
Y vaya que me terminó convenciendo Pastora... Ya desde el
momento en que nos hicimos inseparables, que ella se volvió en la excepción,
quizás al ser cantante como yo entendería todo mi rollo de los conciertos y
viajes... Quizás al fin estaba frente a la oportunidad de mi vida de haber encontrado en mi camino a la persona que tanto estaba buscando en mi vida.
·
Mientras
tanto en un resto de Madrid...
-Mi malagueña de mi vida! –Abrazándome re fuerte-
-Mi niño, malagueño me vas a dejar sin aire! –Dije entre
risas-
-Wee para tanto? Toma asiento mi vida -Dice separándose de mi-
-Dime Pablete, a qué debo el honor de esta invitación? –Dije
entre risas-
-A que tengo tiempo libre y lo quiero compartir contigo, y
cuéntame que te veo con un brillo en los ojos, que madre mía, puedo percibir
algo de amor ahí, he? –Dice con cara de pícaro-
Qué hago? Pablete es mi amigo de hace muchos años, siento que
debo contárselo, aparte quiero compartir con alguién esto que siento, las
amistades de Malú ya lo saben, diciendo
por Melen y Pastora; alguien de mi entorno debería saberlo, no?
-Mira, si mi niño te cuento... me siento una estúpida he
conocido a alguién, que me ha liado pero de la mejor manera, como nunca nadie lo
hizo –Dije entre risas-
-Enhorabuena guapa! Me alegra mucho! Y dime, la tía es guapa, me imagino? –Suelta entre risas-
-Si, es muy guapa, no solo por fuera sino por dentro, su
personalidad es demasiado indomable y eso me gusta, tiene carácter fuerte y es
una tierna como ninguna en momentos... y más aún, está metida en el mundo
de la música como nosotros –Sonreí mientras tomaba un sorbo de la copa de vino-
-Wee venga, cuenta más por favor, que me estas dejando con la
intriga mujer! –Dice muriendo de la incertidumbre-
-Es Malú mi niño... –Dije sonriente-
El rostro de Pablete
era un poema no sabía que decir, lo dejé sin palabras, se arrimó a mí y me
abrazó... Platicamos de cómo nos conocimos hasta llegar al punto de empezar
algo. Y a decir verdad cada vez que le iba relatando me iba dando cuenta hasta
de detalles, que me habían pasado desapercibidos, y empecé a tomar conciencia de
la responsabilidad que tendría al ser pareja se semejante mujer, que por
cierto, es una de las artistas más importantes del país. Joder que me he metido
en un problemón, porque es casi seguro que tendremos que mantenerlo en secreto y
a decir verdad, no me gusta ocultar nada a nadie, soy una persona muy
transparente en ese sentido...
-Pues, mi Vane querida te felicito! Y vamos a brindar por el
amor, mira Vane quién te dice a lo mejor encontraste a la mujer más importante
de tu vida! –Suelta, chocando nuestras copas-
·
A
todo esto, la noche ya cubría el cielo de Madrid, las luces de las calles alumbraban
a penas las sombras de los autos y personas al pasar... Y Malú decide poner a
prueba a Vane... Le dice por móvil que se sentía muy cansada para salir, que lo
dejen para mañana.
Narra Vane
Pobre mi niña esto del disco la tiene agobiada, y yo con mi
torpeza de decirle que hoy nos veamos... como si no entendiera el mundo de los
artistas.
-Bueno mi niño solo quedamos tu y yo, qué quieres que hagamos
Pongo? –Dije mirando a mi perro-
Pongo se subió al sillón invitándome cordialmente con su
mirada a imitar su accionar. A lo que acepte. Miramos la tv, y justo enganché el
especial de Adele, y quedé fascinada, es más lo grabé. Sin dudas es un artista
que admiro. Y estaba yo en mi mundo de nostalgias junto a mi Pongo, mirando a
Adele cuando el timbre me sacó de esa tranquilidad en la que estaba tan
inmersa.
Voy por abrir la puerta y ni siquiera termino de ver quien
era, cuando alguién se abalanza sobre mí como si fuera un tigre a su presa, y al
sentir su fragancia supe que era ella... la dueña de mis pensamientos.
-Amor qué haces aquí, no era que estabas cansada? –Dije
sorprendida y alegre-
-Cielo te extrañaba muchísimo! –Dice mientras me abrazaba en
la puerta-
-Anda pasa –Solté cerrando la puerta y caminando hacia el sillón, donde
ella ya se había acomodado, al lado de mi niño Pongo-
-Traje helado!!! –Dice con voz de niña, mientras me muestra el
pote... de helado, no penséis otra cosa xD- Vane, cielo qué estás viendo? –Dice
observando la tv haciendo gestos graciosos-
-Estaba viendo un especial de Adele que enganché de
casualidad- Dije entre risas abriendo el pote de helado-
Ella sonríe y mientras tomamos el helado, del mismo pote, me
cuenta todo lo que hizo en el día, y es maravilloso ver y descubrir cada día
que pasa, un detalle nuevo de su personalidad, a decir verdad cada parte de ella
me engancha más... Sí, mucho más que el documental de Adele, lo admito. Observo cómo
me narra su día, como una niña cuando redacta un cuento, con ilusión, con
alegría y con cierta inocencia.
-Vane cielo, estás bien? Me estás mirando, pero creo que no estás
escuchando nada de lo que te digo –Dice levantando su ceja, muy típico de ella-
-Si amor, solo te contemplo, mientras me cuentas tu día, que
por cierto por lo que cuentas fué bastante movido- Dije mientras hacia un
bocado al pote de helado-
-Vane, hay algo que quiero preguntarte... –Suelta esta vez
mirándome seria-
-Dime amor, venga... –Dije algo preocupada por su seriedad-
-Quiero que seas honesta, también lo seré yo...Qué sientes
por mí? –Dijo mirándome fijo a los ojos-
-Malú cariño... –Dije mirándola a los ojos- no sé si es
demasiado pronto o no, pero... –Tomé de su mano y la miré a los ojos- Te Amo...
pero con locura diría ya –Dije esbozando una sonrisa amplia, al ver que ella sonreía- Eres lo mejor que me
está pasando en la vida
-Mi amor, también Te Amo, y diría que te empecé a amar desde
el momento en que te conocí y en lo especial que me hiciste sentir –Dice
sonriendo y emocionandose-
-Mi amor, me pasa exactamente lo mismo –Dije abrazándola fuerte y
emocionandome también, porque si ella llora automáticamente lo hago-
Y en ese momento sentí como nos hacíamos una por completo... Esta vez no se trataba de sexo, se trataba de algo más, de un sentimiento
fuerte, que puede cambiarlo todo en una persona, que la hace sentir fuerte,
invencible ante las adversidades de la vida... o al menos eso es lo que
creíamos.
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