"Hiciste de mi rutina una aventura..."

"Hiciste de mi rutina una aventura..."
"Hiciste de mi rutina una aventura, provocaste en mí el desorden y la duda..."

Vistas de página en total

lunes, 4 de abril de 2016

Capítulo 43: "Mañana hablamos..."


·        Tras la vuelta de Sevilla, retomaron sus obligaciones en Madrid. Si, ya andaban de demasiadas vacaciones, en algún momento deben de trabajar no creen? xD, como decia 3 días antes de comenzar diciembre del 2011...



Narra Vane
Estaba en casa pasándola genial junto a Ana y a Inma que vinieron a visitarme. Estábamos entre pláticas en plena siesta, y no parábamos de reír ante cualquier bobería que hablábamos, sin embargo noté a Inma un poco extrañada. Y ante una llamada que irrumpió al móvil de Ana, aproveché para indagarla...

-Quieres otra cerveza amiga? –Dije sentándome a su lado y señalándole la botella que tenía en mi mano-
-No gracias, que no suelo beber a estas horas –Suelta entre risas-
-Bueno... –Dije destapando la botella pequeña, contra el marco de la mesa- Tampoco yo, pero Ana me lleva por mal camino, ya ves? –Dije mirándola fijamente y encogiéndome de hombros, sonriendo-

Ella solo sonríe, pero tenía en su mirada tristeza.

-Sí, y tú que te dejas llevar, eh? –Dijo vacilándome, esquivando mi mirada-
-Inma... –Dije suave y ella me miró asustada- Te sucede algo que quieras hablarlo? –Dije sin más y ella me miró extrañada-
-No estoy bien Vane... –Dijo bajando su mirada y jugando con la servilleta que tenía en sus manos- Sabes... –Suspiró- A veces creemos que conocemos a la persona indicada pero quizás a veces, la conocemos en el momento equivocado.
-Es otra vez tu chica? –Pregunté seria, dejando la botella sobre la mesa, del frente del sofá-
-Sí. –Dijo seca, terminando de armar un barquito de papel, que lo hizo con la servilleta- Pero no quiero hablar al respecto. –Dijo regalándome una sonrisa fingida, y colocando ese barquito de papel al lado de mi botella, sobre la mesa- He venido a distraerme y a pasármelo bien y olvidarme de mis problemas... –La interrumpí-
-Sabes que conmigo puedes hablar de lo que sea, vale? –Dije preocupada- Si bien hace poco que nos conocemos pero... –Me interrumpe-
-Vane no te preocupes. –Dijo mirándome fijo con convicción- Estaré bien. Y claro que sé que puedo contar contigo siempre boba –Esbozo una sonrisa algo tímida- Sabes qué eres  Vanesa Martín? –Dijo con picardía-
-Vale... –Dije tranquila- A ver que soy? Anda dime –Dije sonriendo-
-Eres como un océano –Dijo sin más, sin mirarme y dirigiendo su mirada a ese barco de papel- Pasaste del subidón de risas y euforia a la calma completa solo para intentar tranquilizarme, en un segundo pasaste de un estado a otro, como lo hace el mar... –Dijo suspirando, y me miró con una sonrisa-
-Pues... –Dije algo intimidada, con mi cara roja como la de un tomatito, mirando el barco de papel de la mesa-

Como puede ser que me sienta asi? Nunca antes me había dicho un cumplido así. Y de los que me dijeron ninguno me había puesto en esta situación. Iba a decir algo más y Ana regresa al salón. Y la plática sigue su sentido del principio.

·        Mientras tanto en otra parte de Madrid...

Narra Malú
Despierto de la siesta con unas terribles ganas de ir al baño. Una vez realizado el acto, regreso a mi cama con una pereza increíble. Me dejo caer en la cama, ocupando todo lo ancho de la misma... Casi logro dormirme de nuevo cuando el sonido del móvil me asusta...

-La madre que parió a quién cojones llame –Dije con furia, cogiendo el móvil y mirando la pantalla- Sí Rosa? Dime qué sucede cariño? –Dije fingiendo carisma-

Me llamaba para decirme que tengo que pasar en la tarde por la oficina que necesitaba de mi ayuda con unas cosas. Una vez que decido colgar, vuelvo a zambullirme entre las sábanas y mi edredón y...

Aparezco en la casa de mi madre. Estábamos en su cocina y a través de la ventana, se veían niños correteando y jugando con mi zoo y también con Pongo... Pero de dónde salieron tantos críos?

-Cariño porque te demoras? Otra vez comiendo a escondidas? –Suelta mi malagueña, abrazándome por detrás-
-Gorda me asustaste –Dije sonriendo y acariciando sus brazos que cogían de mi cintura-
-Mira como se divierten los peques –Dice apoyando su mentón en mi hombro, con una sonrisa y un brillo en sus ojos muy particular-
-Si verdad? –Dije sonriendo- Esa niña que corretea entre esos dos niños es preciosa –Dije observándola bien- Es mi impresión o tiene tus ojos? –Dije algo sorprendida, porque se le parecía tanto-
-So tonta, no? –Dice entre risas, besando mi mejilla y yo quedé como el emoticono de la gota, del was- Esa niña salió a las dos, pero tiene tus ojos color café, gorda. –Dijo eso y me helé- El niño si... tiene mis ojos –Dijo y yo me di la vuelta para tenerla en frente-
-Quieres decir que las dos nos sometimos a...? –Me interrumpió, besándome-
-No me digas que la edad está afectando tu memoria, gorda? –Dijo lanzando una carcajada y dejándome algo sorda- Si tú los tuviste a los dos –Suelta besando mi mejilla- Sí, y fíjate que es como si fuera mío, que tiene mi mismo color de ojos, gorda –Suelta suspirando en mi oído-
-Que yo tuve dos hijos? –Solté con mis ojos como platos-

Y a nuestra plática interrumpe uno de los peques que antes correteaba en el jardín junto a quienes serían mis hijos con Vane... Ella toma distancia, un poco y este peque se dirige a mi directo y tironea de mi camiseta...

-Tía Lula me das postre? Que mi papá me lo quitó para comérselo él –Dice con algo de pena en su carilla-

Me dió una ternura, verlo así. No dudé un instante y saqué de la nevera helado y le di un poco.

-Ten cariño mío –Le dije. Me bajé hasta su altura y solté- Anda dime quién es el insensible de tu padre que te lo quitó, y me las voy a ver con él –Dije brindándole contención al peque que se veía contento ante mi accionar-
-Pues mi papá José quien más? –Dijo sonriendo y se fué de la cocina-
Fruncí el ceño y quede más pérdida que en una fiesta hetero.
-Gorda... –Dije mirando a Vane que no cesaba de comer el helado del pote- José tuvo un hijo? En qué momento? –Dije frunciendo el ceño y rascándome la cabeza- Espera –La interrumpí- Y con quién?
-Pues cariño no lo recuerdas? –Dijo acercándose con el pote de helado, en su mano- Me voy al salón gorda que quedé de llevarle helado a mi suegra –Suelta entre risas-

La sigo en dirección al salón y veo en el sofá a José, un tío que en mi perra vida he visto antes, mi madre con el peque, supuesto hijo de José, y mi chica que no le invitaba el helado a mi madre. Me siento a su lado y...

-Charlotte aún sigue afuera verdad? –Suelta mi madre al peque-
-Sí, está peinando a Danka –Suelta el peque, sonriendo. Y eso me mato de ternura-
-Cariño qué te parece si este fin de semana llevamos a nuestros niños a Málaga? –Dijo mi chica acariciando mi rodilla-
-Me encanta la idea gorda –Dije sonriéndole y dándole un beso en la mejilla-
-Pero qué monas se ven juntas, hacen una hermosa pareja chicas! –Suelta este tío que desconocía-
-Pero no hacen tan linda pareja, como nosotros te diré –Suelta mi hermano, besando la mejilla de este tío, cogiéndolo de la mano y regalándole una sonrisa-
-Qué lindo es ver a mis dos hijos enamorados y que me hayan dado nietos al fin! –Suelta mi madre con alegría-
-Jo... hermano él es tu pareja? –Dije atónita sin entender nada-

Ellos me miraban y reían. Vane y mi madre también reían. Incluso hasta el peque. En ese momento recibo una llamada, era Pili. Le respondo y también reía tras línea. Que esto? no entiendo nada. Y Vane intenta besar mi mejilla sin responder a mi inquietud y...

-Suéltame! –Dije en voz alta, dando un brinco en la cama-
-Tranquila mujer! –Dice mi hermano, que no sé en qué momento llego a mi casa- Que susto, madre mía! –Dice con su mano en el pecho- Te vi algo inquieta al dormir, por eso intenté despertarte. Pero me terminaste asustando tú a mí, bruta –Suelta arrojándome un cojín-
-Sí, perdón hermanito... Estaba soñando y... –Dije mirándolo bien, y recordando el sueño con detalles-
-Y...? –Dice con sus cejas levantadas- Y ves que eres tonta cuando estas dormida? –Suelta entre risas y me contagia-
-Sacudí mi cabeza y sonreí- Ya, más tonto tu que vives entrando en mi casa sin golpear –Solté levantándome de la cama-
-Mujer son las 6 pm y tu aun en pijamas? Esta noche hay fiesta en la casa de Yago y estamos invitados, lleva a Vane –Dice con entusiasmo-
-Venga le diré. Oye me alcanzarías a la oficina de Rosa? –Dije con voz de peque y abrazándolo, asi conduzca él porque no tenía ganas de conducir-
-Vale hermana ñoña, pero cámbiate no vas a ir de pijamas, no crees? –Suelta entre risas-
-Porque no? –Dije tomando distancia y dando una vuelta en mi misma- Si me veo sexy asi –Dije riendo-
-Yo no sé qué vio en ti, mi cuñada Vane –Dice riendo y le arrojé una almohada y salió de mi habitación-

·        Mientras tanto la malagueña fue de ensayo con sus músicos, y luego de unas buenas horas allí, coge el móvil y...

-Había tenido una llamada perdida –Dice la malagueña con sus ojos como platos-
-Cuál de todas las tías que te siguen será? –Suelta entre risas, José Marín, mientras hace un solo con su guitarra y todos ríen-
-Oye más respeto, eh?... Que soy solo de una mujer –Suelta Vane entre risas y  arrojándole un lápiz. Dirige su mirada al móvil, marcando el número y se aleja un poco-
-La tienen controlada, eh? –Dice Joaquín Calderón entre risas-
-Pendiente de su chica... –Suelta Francis, suspirando-
-Nunca antes la había visto así a Vane- Suelta el guitarrista que no puede estar sin tocar su guitarra- Y mira que la conozco de hace años...
-Verdad, con ninguna de las anteriores era asi –Suelta Francis entre risas-
-Creo que nos da lecciones de cómo debemos de tratar a una mujer de verdad, no? –Suelta Alberto Miras, y todos ríen-

Narra Vane
Malú me había llamado dos veces y olvidé decirle que tenía ensayo. En fin me llamaba para invitarme a la fiesta que haría Yago y sus músicos. La verdad no tenía muchas ganas de salir, pero... la sentía tan emocionada al respecto, que no pude evitar decirle que sí. Me decía que estaba en la oficina de Rosa, que me quedaba cerca de donde yo estaba. Y decidí tomarme el atrevimiento de caerle allí de sorpresa.

·        Una hora después... En Sony...



Narra Malú
Lo bueno de todo es que tengo la oficina para mí, nadie me molestaría. Y estaba en mi mundo. De pronto siento que pican la puerta...

-Pase –Dije sin mirar-
-Se puede o interrumpo...? –Esa voz que podría reconocer a kilómetros-
-Gorda, qué haces aquí? –Dije olvidándome de los papeles, arrojando el bolígrafo y yendo a su encuentro-
-Vengo del ensayo y pensé en pasarme por aquí –Dice besándome-

Me gusta que me dé esas sorpresas, esos detalles que para mi parecen los más maravillosos del mundo.

-Pareces toda una ejecutiva, gorda –Dice mientras seguía abrazada a mi-
-Ah sí? Y te gusta? –Dije levantando mis cejas y acariciando su mejilla con mi mano derecha, y con mi otra mano acariciando su cintura-

Narra Vane
Llevaba unos pantalones negros ceñidos, botas y una camisa blanca con dos botones desprendidos, que le quedaban un espectáculo.

-Me encanta! –Dije sonriendo, besándola más si cabe-

La afirmé suave sobre el escritorio. Y se deshizo de mi chaqueta levemente. Mis manos deseosas de quitar su camisa, desprendieron dos botones más y picaron la puerta...

-Jo... –Dice ella asustada-

Me distancio de golpe y ella se acomoda un poco y...

-Sí, pasa! –Suelta ella afirmada en el escritorio, mientras yo estaba sentada en la silla de al lado-
-Disculpa Lula, aquí tienes la otra carpeta que buscaba Rosa hoy –Suelta esta misteriosa mujer-
-Ay muchísimas gracias! Que lo estaba buscando entre estos archivos y no los encontraba –Dijo sonriendo mi chica-
-Hola! –Dijo dirigiendo su mirada a mi- disculpen si interrumpí una charla importante –Suelta esta mujer dándome dos besos- Un gusto soy Sol Pineda del equipo de manager de rlm –Dijo muy sonriente-
-Encantada, soy Vanesa Martin –Dije sonriendo-
-Bueno las dejo tranquilas, me voy al fin a mi casa. Lo que necesites con algo que no entiendas me hablas al móvil, vale? Así como lo hiciste ayer. –Suelta dirigiéndose a la puerta-

Cómo es eso? Dijo “Así como hiciste ayer”?... Cuánta confianza.

-Vale, vale. Muchas gracias Sol! –Dijo mi chica despidiéndose con un abrazo y dos besos-
-Lula –Dijo mirándola de repente- No tienes frío? –Dijo dándose cuenta que llevaba no dos, sino cuatro botones de su camisa desprendidos-
-Eeeh, puff –Suelta de manera graciosa Malú prendiéndose los botones- Fíjate que estoy tan ocupada con esto, que ni noté que se desprendieron –Suelta entre risas-
-Cosas que pasan –Dice Sol, sonriendo y se va cerrando la puerta-

Reí a carcajadas por eso.

Narra Malú
No me había acordado de prenderme de nuevo los botones, a suerte no se me vió nada. Y ante la risa de la boba de mi novia, le pegué en la cabeza con la carpeta que tenía en mis manos, no os preocupéis, era una carpeta fina de pocas hojas,  para ser exacta.

-Oye –Dijo poniéndose de pie y abrazándome-
-Vane no, que nos pillan en cualquier momento –Dije poniendo distancia suavemente- Aparte tengo que terminar esto –Dije arrojando la carpeta sobre el escritorio-
-Vale está bien. –Dijo soltándome y tomando asiento-

Me siento en mi silla a seguir con los papeles, ella estaba frente mío en el escritorio con su móvil.

-Qué maja que es Sol, no? –Dice rompiendo el silencio-
-Sí, es un amor de persona –Dije sin mirarla, y firmando unas cosas- Cariño vienes conmigo a lo de Yago esta noche, no?
-Estaba pensando si nos quedamos en casa? –Dice seria mirándome-
-Cariño yo tampoco tengo muchas ganas de ir, pero van todo mi equipo y siempre se quejan de que no voy, siento que si voy contigo la fiesta me será mejor –Dije sonriente a ver si la convencía-

Justo terminé de hacer lo que estaba haciendo y me pongo de pie. Ella también lo hace. Me acerco a ella y...

-Es que hoy terminé algo cansada, sabes? –Dijo con una mueca, me la está haciendo difícil, nunca le pido nada y ahora que quiero que me acompañe se niega?-
-Pero cariño solo te pido esta vez que me acompañes, ah? Qué me dices? Anda gorda –Dije desprendiendo 3 botones de mi camisa-
-Cariño... –Suelta sonriendo-
-Porfis –Dije haciendo morritos y desprendiendo dos botones más- Ahora me acompañaras? –Solté acortando distancia-
-Vale te acompaño –Dice entre risas, abrazándome, y le como la cara de un beso-

·        2 horas después estaban marcha a la casa de Yago.

Narra Vane
Era una putada la verdad, no tenia ánimos de fiestas pero vine porque me rogó que la acompañara. Además veníamos en plan amigas, porque si bien su banda sabía de lo nuestro, no lo sabía todo su equipo en sí. Todos eran muy majos y demás. Pusieron música, había tragos, tomé un poco nomas, sino me dormiría de seguro. Y entre tanta gente aburrida estaba la simpática y maja de Sol. Que pude observarla mejor, y es muy guapa. Traía un vestido negro, ceñido y corto, tacones y por encima una chaqueta de cuero.

-Cariño quieres algo de beber? –Suelta Malú trayéndome a la tierra-
-No cariño gracias –Dije sonriéndole. Mi chica estaba hermosa-
-Ay escucha! que bonita canción, vamos a bailar anda –Dijo cogiendo de mi mano-
-Malú no tengo ganas de bailar, ve tu con ellos –Dije con pereza, demasiado esfuerzo hice al venir aquí-
-Te sucede algo que no me estás diciendo? –Dijo sin más-

Y si, por qué estaba tan desanimada? Por qué estaba con este desgano? Luego de la plática que tuve con Inma había quedado asi. No podía entender como una tía tan buena persona como Inma estaba sufriendo por alguien que no la merece. Es mi amiga y es lógico que me afecte asi. O no? ...

-Ya te he dicho que estoy algo cansada cariño. Ve a divertirte yo te espero aquí –Dije y le sonreí-

Se fué muy poco convencida. Y al rato se olvidó totalmente de mí, que se la pasaba bailando con sus músicos y también con Sol...Y esa cercanía entre ellas no me parecía tan graciosa. Sol le dice algo al oído y ella ríe y no obstante esta chica tiene la osadía de posar su mano en la cintura de mi Malú. Creo que estoy experimentando celos. Y lo peor, es que veo que Malú no la frena. Y luego me reclama a mí con India. Veo que deja de bailar, y viene en dirección a mi, y me hago la distraída con el móvil...

-Ay cariño me cansé de bailar –Dice sentándose en el sofá a mi lado-
-Ah sí? No parece... –Dije algo borde- Malú vamos a casa mejor –Dije mirándola fijo-
-Ya? –Dijo mirando su reloj- Es temprano gor...-La interrumpí-
-Vale.  quédate yo me voy –Dije levantándome y colocándome el abrigo-
-Vane, espera! -Suelta tras de mí-

Me sigue hasta la salida, y una vez fuera y solas...

-Me puedes decir qué te pasa Vanesa? –Dijo cogiéndome del brazo para darme vuelta hacia ella-
-Me pasa que me cansé de ver como bailabas tan de cerca con Sol, y de ver como rozaba tu cintura en cada oportunidad que tenía, eso me pasa –Dije sin más- Y más aún que tu no la detuvieras.
-Qué? –Dijo haciéndose la desentendida y frunciendo el ceño-
-No te hagas que sabes muy bien a lo que me refiero –Dije bufando, y esquivando su mirada-
-Estás celosa de Sol? Vanesa por favor! –Dijo tapándose la cara con sus manos- Sol es como mi familia, como lo es todo mi equipo –Dijo acortando distancia- Se estaba agarrando en mi porque estaba algo servida y se mareó, nada más –Dijo muy tranquila sacando un cigarro-
-Claro yo he nacido ayer verdad? –Dije cruzandome de brazos-
-Ya cariño, tranquila –Dijo acortando distancia acariciándome la mejilla- Si te he pedido que vinieras conmigo, es porque quería estar contigo y pasarla bien a tu lado. Te invité a bailar y no quisiste, vale, lo respete... –La interrumpí-
-No me respetaste desde antes. No quería venir, me insististe y vine. Te dije que no quería bailar, y tú no has dudado un segundo en ir tras Sol y bailar de lo más bien –Dije frunciendo el ceño, cruzada de brazos-

Narra Malú
Vuelve a lo mismo, qué le pasa? Me está cabreando y estoy perdiendo la paciencia.

-Mira sabes qué? –Dije alzando un poco la voz-  A mi no me vas a venir a mandar, vale? Si tú no quieres bailar, porque a saber porqué estas tan borde y aburrida, y encima que te he preguntado no me lo quieres decir, no es mi problema. Si me apetece bailar y mi novia no me quiere acompañar pues no me voy a quedar esperando. Y con respecto a Sol ya te lo he dicho por milésima vez.

Mientras seguía diciéndole cosas ella me miraba fijamente intentando calmarme. Algo le pasa, y no sé si es conmigo o con quién, pero rara la noté desde antes de venir a la fiesta. Le pregunté camino aquí y solo atinó a decir estar cansada. Pero me saca de mis cabales que me haga una escena asi de la nada.

-Ya, podrías calmarte y no alzar la voz? –Suelta con sus ojos como platos- Sabes mejor hablamos mañana, cuando tu estés tranquila y también lo esté yo. Sino ahora no lo haremos nada bien –Dijo poniendo distancia-

Y me dejé llevar por el impulso. La tomé del brazo, la traje hacia a mí y la besé. La besé afuera, al lado de la puerta de entrada, en una noche helada y ella tenía su abrigo y yo no, y a pesar de la rabia que me dió que se comportará así conmigo, la callé de un beso. La puerta se abrió y no sé quien salió ni me importó, seguí besándola como si no hubiese un mañana. Luego se sintió que cerraron la puerta de nuevo.

-Malú... –Dijo suave abrazándome- Estas temblando cariño...
-Tengo frío... podemos volver adentro? –Dije sonriéndole-
-Ve tú... –Dijo bajando la mirada- Yo me iré a casa –Me beso en la frente- Mañana hablamos gorda –Dijo sonriendo, yéndose en dirección a su auto-
-Pero  Vane... –Solté al aire, tras ver que se iba, mientras me abrazaba a mi misma del frío que sentía-

·        Al día siguiente...



Narra Vane
Despierto y lo primero que veo es el móvil... tenía mil was y 3 llamadas de mi chica. Me siento algo mal, creo que anoche he exagerado un poco la situación. Me levanto, me doy una ducha rápida, me preparo el desayuno, extraño a mi Pongo, anoche pensaba pasar la noche en Malú, y por eso se lo dejé a Ana. En fin, debo arreglar las cosas con ella.

Narra Malú
Desperté fatal... No sé que tengo pero siento que estuviese incubando un virus. Mis moquillos salen como el agua del grifo, estornudo cada segundo, y Chanelo sale espantado ante mi aspecto. En estas condiciones no puedo cocinar, está claro. Le marco a mi madre a que venga a ejercer como buena madre santa que es. Llega a la hora, y me trae el desayuno a la cama tal y como a mi tanto me gusta...

-Aquí tienes hija –Dice mientras me da la bandeja-
-Gracias mami!!! –Dije con entusiasmo- Necesito vitaminas parece –Dije sonándome la nariz-

De todas formas narradora no hace falta dar todos los detalles, no crees?

·        Cómo que no? Los lectores no son adivinos, tienen que imaginarse bien detallada la escena xD...

Ya hablaremos esto en privado, eh? (dije en tono amenazante a la narradora)... Perdón, como os decía, mi madre se portó genial. Y mientras ella me hacía el almuerzo, veía tv en mi cama. Veo el móvil tenía una llamada entrante, era de mi Vane...

-Hola gorda! –Dije con una sonrisa de idiota importante en mi cara-
-Hola cariño, cómo estás? –Dice tras línea sonriente, pude notarlo-
-Aquí algo enfermita –Dije haciendo voz de peque- Necesito que me mimen...Vienes?
-Gorda en un rato voy, quieres? Pero antes debo ensayar...
-Siii claro que quiero! –Dije con entusiasmo- De todas maneras no te preocupes, que mi madre está aquí ayudándome –Dije volviendo a sonarme la nariz-
-Oye dale saludos a mi suegra –Suelta a carcajadas-
-Vale gorda, se lo diré. Mil besos cariño –Dije haciendo el sonido de un beso-

Y justo irrumpe mi madre en la habitación.

-Ay esa carilla –Suelta entre risas y me puse más roja, que el color de mis uñas- Hablabas con Vane? –Dice mientras se acerca y toma asiento en la cama-
-Siii –Dije tapándome la cara como el monito del was- Te manda saludos –Dije mientras bebía un poco de agua, que me tenía en la mesa de noche-

·        Mientras tanto en la casa de la malagueña sexy de esta novela...xD

Narra Vane
Gracias por el halago narradora! Como os decía, vamos a ensayar junto a Ana que últimamente está conviviendo conmigo, más que mi propia novia. Una vez que llegamos, antes de bajar del auto...

-Pero que ojos mas brillosos tenemos hoy día eh? –Dice vacilándome- No se nota que has arreglado las cosas con Lula, eh? –Dice empujándome con su codo-
-Ya... calladita te ves mejor, eh? –Dije entre risas- Fui una idiota amiga... –Dije mirando el volante del auto- La traté mal, le hice una escena de celos sin sentido –Bufé-
-Piensa. Qué es lo que te sucedió en ese momento? Digo para que actuaras asi –Dice expectante-

Le conté a Ana lo que me dijo Inma. Ella lo sabía, al parecer soy la última en enterarme de todo. En fin Ana es mi amiga, sabe entenderme y ella también estaba preocupada por Inma.

-Pero oye tranquila. Lula te quiere, acaso no recuerdas que te dijo que quiere formar una familia contigo? –Dice posando su mano en mi hombro, mientras sonríe-

·        En la casa de la madrileña sexy de esta novela...xD

Narra Malú
     Gracias sexy narradora! Como decía, sabía que no debía de contarle, a mi madre, lo que hablamos con Vane en Sevilla. Se emociona a tope con todo, y no...


-Me vas a dar nietos!!! Que noticia más maravillosa hija! –Dice mi madre, haciendo palmas, no sé porque-
-Mami, espera, espera! –Dije intentando frenar la euforia de mi madre- Mami –Dije protestando y  arrojándole un cojín- Aún debemos hablarlo bien, vale? Una vez que terminemos con nuestras cosas... –Me interrumpe-
-Aiins imagino los domingo de fiesta flamenca en casa, y tus hijos correteando por el jardín –Dice tapándose la cara como el monito del was-
-Cómo “tus hijos”? nunca dije que tendría 2 –Dije frunciendo el ceño- Aparte me encantaría que Vane tuviera a nuestra hija –Dije mirando el pañuelo que tenía en mis manos, sonriente- Saldría con esos hermosos ojazos –Dije mirando el techo, haciendo una voz rara- Y eso me haría morir de ternura –Dije tan contenta-

·        Pasaron las horas... Vane salió del ensayo, y se detuvo unos instantes para comprar algo, para llevar un presente a su madrileña. Luego de conducir media hora, llega a Majadahonda



Narra Vane
Ingreso a la casa de mi chica y Danka viene a mi encuentro. Veo la casa con una calma. Subo las escaleras y ahí la veo. Me afirmo en el marco de la puerta y deleito mis ojos al verla asi. Estaba recostada en su cama, tapada con el edredón. Al parecer vestía su pijama favorito, y tenía un libro entre sus manos. Me acerco suave, para no despertarla.

-El libro que ayer buscaba impacientemente, me lo habías robado, tu eh? –Dije sonriendo, ella ni se inmuta-

Me acomodé a su lado y la abracé. Eran las 19 pm. Al parecer se sentía muy decaída y por eso se quedó dormida. Cojo el libro e hago el intento de empezar a leer y...

-Vane? –Dice dormida aún-
-Si cariño aquí estoy –Dije besando su frente- Cariño estás volando de fiebre –Dije preocupada-

Me mira a los ojos y sonríe.

-Si estás aquí ya se me pasará. Te necesito gorda! –Dice acurrucándose entre mis brazos- Perdona por lo de anoche gorda –Dice aferrándose a mi fuerte-
-Gorda tranquila, mi comportamiento anoche fue... –Dije acariciando su espalda y mirando el techo- Fui una gilipollas, vale? –Dije y besé su frente nuevamente- Gorda mira lo que te traje –Dije enseñándole unos chocolates-
- Cariño te amo!!! –Dijo de un grito, que casi me hace salir corriendo-

Se le pasó la fiebre, el desgano y todo. Me quitó las barras de chocolate que le traje y se puso a comer como una niña peque. Luego de un par de horas...

-Ya estas mejor? –Dije acariciando su mejilla-
-Si gorda, necesitaba que estés aquí para mejorar –Dijo sonriendo y acortando distancia, para regalarme un beso-
-Malú... –Dije como pude ante sus besos- Aún tienes fiebre... –Ella me mira, se sonríe y sigue besándome- Malú... enserio –Dije tocándole la frente-
-Sí. –Dice entre risas- Gorda, estoy muy caliente –Suelta y vuelve a mis labios-
Tranquila vale? –Dice sonriente- Me está pasando. Debería estar ensayando con Pablo a estas horas y lo único que le puedo agradecer a este malestar que tengo, es que te tengo aquí a mi lado entre mi edredón –Dice besando mi mejilla y reposando su cara en mi hombro. Mientras que su mano izquierda juega en mi ombligo sobre mi blusa-
-Con Pablo? Qué van a hacer un dueto? –Pregunté intrigada. Ella me mira-
-Si en unos días son los premios 40 principales y me pidió hacer un dueto... a lo que no me negué. Y cantaré una canción que te la dedicaré a ti, gorda –Dice mirándome fijo y sonriendo-
-Ah sí? Y cuál cantaras? –Dije besándola-

·        Mientras tanto en la casa de José de Lucía...

-Si? Rosa? Qué sucede?–Dice José tras atender su móvil, dándole una calada a su cigarro-
-Puedes ubicar a tu hermana? Intento llamarla al móvil pero no me responde. Necesito hablar con ella urgente.
-Pues se sentía mal hoy día. –Suelta rascándose la cabeza- Mi madre me dijo que estuvo con ella todo el día y que luego se quedó dormida porque no estaba bien. Pero qué ha pasado? Si tiene que ver con mi hermana también tiene que ver conmigo, dime. –Suelta con preocupación-
-Me acaban de llamar para decirme que los del Hola tienen unas fotos de tu hermana y Vanesa besándose en una playa de Sevilla...Y me piden muchísimo dinero por ellas...


Continuará...


No hay comentarios:

Publicar un comentario